domingo, 23 de septiembre de 2007

Gay Day

Hoy es el día de la Primavera.

Como siempre, Lima nos muestra su cariño invitandonos a abrigarnos un poquito más de la cuenta. Con esta temperatura de 13º -que parecieran cero- hace tanto frio que desanima a uno de hacer cualquier cosa. Sin tanta vaina: ¡hace un frio de mierda!

En honor a la verdad, nunca he sentido tanto frio. Y esta no es de esas afirmaciones de borracho que después de una trancasa dice: "Nunca me la he pegado tan feo" porque sabemos que es mentira. Yo me acuerdo haber estado en Atlanta a 33º F y sólo vestía un jean y una casaca de verano. Ah! para los burritos 32º Farenheit es igual a 0º Celsius. Me acuerdo que caminando por la calle, buscando un café, casi me saco la mierda, porque pise un pedazo de hielo que se había formado por culpa de unas gotas que caían desde un techo a dos aguas. Me acorde de Discovery Channel cuando pasan sus especiales cheveres y te muestran desde como se abre una flor hasta como se forman los conos (hacia abajo) de hielo en las cavernas.

Bueno, me acorde de eso y quería compartirlo ¿Porqué hoy? Porque supuestamente es un día especial. Aunque sea un día mariconesco o día gay [1] -así como los son el 14 de febrero y el 27 de junio- me simpatiza mucho esta fecha porque marca el inicio de una serie de tipos de días que me gustan mucho. Esos días que sale sol, pero no mucho, como para seguir abrigándose, pero no tanto.

Antes no sabía cuando esperar estos días, y cada vez que me tropezaba con uno me alegraba de sobremanera calificándolo como el mejor día del año (pero al igual que las borracheras, el siguiente que venía era el mejor).
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Fue peculiar la manera de conocer este simpático día y grabarlo para siempre en mi memoria. Un 23 de septiembre terminé tácitamente mi relación con una simpática chiquita. Le dije para estar =oS. La formalidad mató la espontáneidad de mi relación, pero es un error aprendido, y materia de discusión para otro post.
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Esta nueva primavera abre nuevas y varias discusiones; el juergón de La Molina; el juicio de Fujimori; la baja del Cristal; la sexualidad de "Chiquito" Flores; la virginidad de "Foquito"; entre otros temas; algunos coyunturales, otros que parecen eternos.
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¡Feliz Día de la Primavera! =o)
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1. Que no parezca despectivo, mi relacion con los homosexuales es cordial, y mas allá de verlos mal, tengo cierta admiración hacia su causa de liberacion sexual, y la manera valiente en que soportan la discriminación por su orientación.

sábado, 15 de septiembre de 2007

Cómo ampliar vacantes - ii

Problema 2: Profe seco/a
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La mayoría se profes suelen ser poco empáticos, esta afirmación vendría a ser un axioma, ya que todos sabemos que es verdad, pero no hay como demostrarlo. Es verdad porque si fuesen más o algo empáticos no habría tanto "profe malo", teniendo como principio pedagógico lo escrito en el Manifiesto Liminar (o Manifiesto de Cordova): "Si no xiste una vinculación espiritual entre el que enseña y el que aprende, toda enseñanza es hostil y por consiguiente infecunda."
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Sugerencia
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Normalmente uno no conoce a los profes con los que va a hablar, entonces cuando nos encontramos con un/a profe asado/a nos mueve el piso y no sabemos como meter ese floro ya preparado; ya sea sentimentalón o académico, ya que intuímos que al profe no le va a interesar.
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Sugerencia 1: Preguntar cómo es el porfe; buena gente, mal humorado, desganado. Lo que sea. Cualquier cosa para saber qué y cómo le decimos las cosas al profe.
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Sugerencia 2: Pedirle a un amigo nuestro que es amigo del profe que nos acompañe. Su sola presencia hará que el clima de diálogo sea más informal, y hasta podría llegar a interceder por nosotros "ya pe' profe, no sea malito".
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Ejemplo
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Esto fue lo que me pasó el día lunes cuando busqué a la profe de Bioquímica Pesquera para que me ampliara una vacante.
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Al saber que era ella la profe de Bioquímca me asusté un poco. A la profe la había visto siempre discutiendo con los organizadores del Bautizo Molinero, ya que ella siempre defendía a sus alumnos, y se molestaba con los chicos que bautizaban. Pero no dejé que esto me amilanara, entré y con voz amigable, pero firme dije:
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"Buenos días profesora, estoy buscando a la profesora Pilar Aliaga", pregunté cordialmente.
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-"Si, soy yo, ¿que desea?", me responde algo seca.
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"Bueno profe, la busco porque quería preguntarle -no pedirle- sí va a ampliar vacantes para el curso de Bioquímica.", con voz cálida y alegre.
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-"No, no voy a ampliar. Hay como cincuenta alumnos, ya son muchos", respondió friamente.
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"¿Ni una sola vacante?", le pregunté con la misma calidez, algo incomodo por su respuesta tan seca.
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-"Bueno a lo mucho tres vacantes. No hay espacio en los laboratorios", me dijo muy seriamente.
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"Ahh... OK... si claro entiendo, la prioridad es que los alumnos estudien en ambientes adecuados -le dije mientras la profe seguía revisando su catálogo de ESIKA- Bueno, profe no la quiero seguir molestando, la veo muy ocupada (no puedo con mi genio), pero ¿no hay consideraciones para los pesqueros?"
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"Ahh, eres pesquero y ¿porqué no fuiste a clases? les dije a todos los pesqueros que si querían ampliar vacantes que se apunten en una lista. Si te interesara el curso hubieras ido!", afirmó categórcamente la profe. Y de hecho me cagó, tenía razón, tuve que haber ido a clases. Me descruadró, pensé que no lograría una vacante...
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"¡Tiene mucha razón profesora! -alcé la voz- Pero no pensé que era adecuado molestarla en plena clase por asuntos personales", le dije de manera magistral.
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La descuadré, dejó de leer el catálogo y me dijo: "Igual la lista ya está hecha y ya la mandaron", sentenció.
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"Pucha que pena -me puse triste (parte del floro)- pero ¿podría preguntarle a la secretaria si ya la mandó? -con una sonrisa en el rostro-". La profe no sospecho de mi inteligencia y en el momento que me dijo que ya habían mandado la lista, yo sabía que tendría mi vacante =o). Y es que los que hemos ejercido algún cargo de representación en la universidad sabemos que los tramites no son tan eficientes, es imposible que un documento preparado a las 11 esté en trámite a las 11:30. Felizmente la profe no me conocía, y pensó que era un alumno ingenuo más (sorry por las flores, pero es cierto).
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-"Bueno anda a ver", me dijo la profe medio asada, sabía que perdería.
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Dicho y hecho, la lista ni siquiera estaba preparada. A mi vuelta, la profe ya tenía preparado un post-it y un lapicero para que escribiera mi nombre y me agregara a la lista para la ampliación de vacantes. Jajaja. =o)
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Tips
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Ir bien vestido, sobretodo si es una profesora.
Ser cortez.
Hacerle pensar al profe que tiene la razón y que en ese momento es dueño de nuestros futuros.
No insistir mucho. De hecho, no creo que existan personas malas y si no pueden ampliar vacantes son por razones técnicas más que personales.

Cómo ampliar vacantes - i

Ayer viernes concluyó la primera semana de clases, para variar un poco, y como se comentó en el post sobre las consecuencias de los retiros extemporáneos de cursos, tuve que ir a "ampliar vacantes" de ciertos cursos muy solicitados.
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Luego del proceso de matrícula quedé muy incomodo, se me habían cerrado 3 cursos. Parecería un escándalo, pero este ciclo fuí muy ambisioso y quise matricularme en 7 cursos.
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Empecé entonces a diagramar las estratégias y los floros para abordar a los profes y accedan a abrirme una vacante. El objetivo era complicado: que digan "sí".
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Los cursos que se me había cerrado eran: Administración General, Termodinánica General y Bioquímica Pesquera.
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A Continuación relataré un poco mi experiencia acerca de cómo hacer para lograr la tan ansiada ampliación de vacantes.
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Problema 1: Ubicar al profe
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Los profes tienen por costumbre no estar los primeros días de clases, de hecho, les jode estar recibiendo a cada pajero que quiere matricularse en su curso, por lo que salen de su oficina así no tengan clases, y así los esperes, nunca llegan, y si llegan te cierran las puerta sin oportunidad para el diálogo.
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Sugerencia
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Los alumnos inexpertos se asustan, desesperan y se ponen tristes por no ubicar al profe. Ya para los más experimentados es sencillo, lo "trackeamos" en la "Guía del Estudiantes" (es una guía donde sale la relación de todos los cursos, las horas, las clases y los profes) más conocido como "Boletín" y damos con el profe en su clase. Éste, al no poder esconderse, se ve obligado a diálogar.
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Si por A o B cambiaron la clase, se le pregunta al encargado del módulo (conjunto de salones). Es obvio que debe existir un vínculo de cordialidad entre el alumno y el encargado para que este acceda presto a atender nuestro reclamo.
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Las cosas se complican cuando el profe no va a sus primeras clases! jajaja, suele pasar, pero no es lo normal.
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Tip
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Abordar al profe luego de su clase