PELIGRO: Mar de Grau

:: Juan Pablo Testino ::

24 de Agosto del 2009

Empieza el ciclo segundo del año académico 2009.

Atento como un zorro del Sechura, sangre fría como la iguana bajo el sol del Ñuro, con sentimiento puro, así entro al aula molinera.

Ya a sabiendas que esto no es un estanque ni una pecera, sino un Mar de Grau de muchas millas, volando como pelicano, retrocediendo como cangrejo, y, al ver los gallinazos, tantas dudas emergen sobre el "cómo", el "porqué" y el "para qué" de mi carrera. Dudas como qué pensaría Moisés si tentaría abrir el mar peruano, pero respuestas no encuentro, aunque tengo fe que todo se despejará. Como lo despejó Abraham cuando dejó Ur para ir a Canaán.

El mar y sus riquezas son uno de los pilares estratégicos del desarrollo nacional, como a su vez la Pesquería es uno de los pilares de las ciencias del mar, el cual es un ecosistema que hay que vivirlo para entenderlo. Por ende la naturaleza del Ingeniero Pesquero, acompañado de la buena base teórica que los docentes inculcan, debe complementarse con una identificación con la raíz de la Pesquería propiamente dicha: EL PESCADO. Por ello me reafirmo en mi convicción de llegar a ser un Ingeniero Pesquero, aunque cada semestre pareciera estar más lejos y más cerca el objetivo, cuando me den el cartón de bachiller que dice "PARE DE SUFRIR QUE EL DIABLUUU LO ESTA ENGAÑANDUUU"

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¿Qué siente la liza cuando salta? ¿Por qué el pelicano vive hasta que muere? Será porque vuela en "V" o será que muere cuando se atraganta comiendo una anchoveta, esa anchoveta que tan "estudiada" tenemos los pesqueros, pues les hemos contado las escamas 30 veces en cada laboratorio para convertirlas en lo que son y serán, harina y millones de dólares cuya única factura pagarán nuestros propios hijos. Todo porque el sistema político-pesquero explotador de biomasa de anchoveta. En boca de todos está denunciado pero nada ha sido arreglado.

Señores funcionarios del ministerio de la Producción, Viceministerio de Pesquería, Gremios Pesqueros, Sindicatos, señores Ingenieros Pesqueros:

ESTAMOS COMETIENDO UN GRAN ERROR en cuanto a la biomasa marina, en contra de la cadena trófica que a este paso en vez de cadena ya parece biela y pistón, pero sobretodo presenciamos un error en materia de lucha contra la pobreza y desnutricion.

La depredación y la falta de control por un lado, están terminando de matar lo que alguna vez fue "la gran riqueza" del Mar Peruano. Lamentablemente, y pese a que muchos lo nieguen, esto ya no así en la actualidad. Basta madrugar un día para ver que los balseros, quienes antes alzaban sacos llenos de pámpano y come-trapo, regresan a tierra con una sola liza. Ahora para la pesca del famoso mero murique tienes que ponerle un plomo para que tu carnada baje 20 metros más, porque el pescado cada vez se va más lejos y así lo seguirá haciendo, porque cuando no haya donde correr, simplemente DESAPARECERÁ.

¡¡¡Dichosos los que llegaron a conocer al Pez Sierra!!!

Así es Señores Chinchorreros, naves arrastreras, las naves vikingas provenientes de Chimbote e Ilo arrasando todo lo que encuentran en su camino al Ecuador, los larveros, los buzos con compresora, la pesca de arrastre dentro de las 5 millas, ¿porqué esta falta de control señores de la Dirección General de Capitanías y Guardacostas del Perú?

Hasta Cucho, el mejor de los pescadores de altura que hayan visto mis ojos, quien hasta hace poco regresaba a la bahía con su bote lleno de atunes y pericos, en la actualidad se tiene que conformar con una caja de diablos, pejes y gallos.

Yo no pesco un róbalo desde el 2002 y ¡siempre tiro la carnada Señor Cardenal!

En la otra cara de la moneda, la ecología y la llamada "Protección al medio ambiente" encuentra su boom y yace en la gloria, pegan stickers que "yo no como delfín porque hago jiu jitsu con ellos". Tanto alboroto en base a hechos sucedidos en el pasado, como lo fue el peligro de extinción de lobos, delfines, ballenas y todo el smile shot en su conjunto, en el campanazo inicial de los 90's. Pues han pasado dos décadas de SOBREPROTECCION y pregúntale tu a un pescador de Pucusana cuantas pesadillas le ha dado el lobo marino que le roba el pescado de la red. ¡Ah! ¡Pero no! No toquen al lobito no sea que su abuela se ponga triste! Nadieeee toque al lobito!!! Vayan maten a las anchovetas que no corren como Bolt ni bailan como Shakira.

Huele a que los espectaculares saltos de las ballenas son más efectivos que darle de comer a todo un colegio estatal en Cancas, el fraternalismo del hombre con el delfín, de la harina de pescado con la corbata del pescador, o ¿será acaso mejor ser un delfín enfermo en las playas peruanas que un campesino hambriento en los Andes? Son sólo los apetitos de los grandes grupos de poder?, ¿acaso ellos comparten la culpa de que estos mismos ojos no ven una sardina hace 4 años y muy poco se hable sobre su peligro de extinción. Las ONG’s protectoras de las sardinas brillan por su ausencia. Por lo tanto, ante tanto sufrimiento que ven mis ojos me pregunto de qué me servirá mi cartón de Ingeniero que "pare de sufrir que el diablo 'ta engañanduuu" si a este paso mi única respuesta será "mais el pescado esta agotanduuuuu". ¡No! No son sólo mis bloqueos en bioquímicas obstáculos para llegar a la meta. No entiendo ¿cómo quieres que esté tranquilo?, si en 8 años estudiando enzimas, ángulos y temperaturas si cada noche escucho que Grau está llorando porque su mar está muriendo.